Había una vez un giro de suerte…
Mientras los Perros terminan un año de la Liebre bastante más equilibrados que muchas criaturas en la granja zodiacal, pronto verán que bajo la sombra del Dragón las cosas comienzan a tomar un tinte más oscuro pues están a las puertas de su año contrario.
Por aquí y por allá comienzan a surgir imprevistos que mantendrán intranquila el alma del Perro y comenzarán a distraerlo de aquello a lo que quería invertirle tiempo. El Perro deberá saber reunir a su jauría para no sentirse solo en el remolino del Dragón y poder defender sus barcos ante las luchas de poder que surgirán en el camino. Deberá ser paciente, tolerante y valiente al mismo tiempo para dar los pasos importantes y deberá saber encontrar refugio en aquellos que le den afecto pues a diferencia de otros años podría llegar a necesitarlo.
Son muchas cosas las que deberá atender este Perrito que se sentirá atado en el año del Dragón. Deberá vigilar la salud y tomar doble medida ante todo lo que pueda representar un riesgo pues los giros de suerte podrían estar a la vuelta de la esquina. Hay que saber por dónde llegará el Dragón. Si el Dragón atrapa al Perro lo llevará a girar en un torbellino de situaciones que le darán vértigo. Es mejor mantener un perfil bajo para pasar desapercibido aunque en el encanto social pueden conseguirse más apoyos en la jauría.
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